
¿CÓMO ES NAVEGAR?

En otros capítulos hemos hablado de las embarcaciones y el proceso del manejo de un barco. A esa acción del empleo del mismo se la llama “navegar”, y puede ser una de las actividades más emocionantes, plena de una libertad inimaginable. De hecho, una de las canciones que utilizo para relajarme es “Sailing (Navegando)”, tanto por Rod Stewart como por Christopher Cross. Pero también navegar puede ser la peor experiencia que puedas vivir: preguntar hasta cuándo durará este movimiento y desear que, ¡por favor!, cuanto antes termine esto de una vez.
¿Por qué hay tanta diferencia de opiniones? ¿Cambia el barco? ¡No! ¿Cambian las personas? ¡No! Cambia el medio donde nos desplazamos, el mar. Leamos la experiencia de unos marinos en el SALMO 107; NVI:
23 Se hicieron a la mar en sus barcos; para comerciar surcaron las muchas aguas. 24 Allí, en las aguas profundas, vieron las obras del SEÑOR y sus maravillas. 25 Habló Dios y se levantó un viento tormentoso que encrespó las olas 26 que subían a los cielos y bajaban al abismo. Ante el peligro, ellos perdieron el coraje. 27 Como ebrios tropezaban, se tambaleaban; de nada les sirvió toda su pericia. 28 En su angustia clamaron al SEÑOR y él los sacó de sus aflicciones.
29 Cambió la tempestad en suave brisa: se sosegaron las olas del mar. 30 Ante esa calma se alegraron y Dios los llevó al puerto anhelado.
31 ¡Que den gracias al SEÑOR por su gran amor, por sus maravillas en favor de los hombres! 32 ¡Que lo exalten en la asamblea del pueblo! ¡Que lo alaben en el consejo de los líderes!
Es la típica descripción de un viaje en barco. Se sale con diferentes propósitos y se contemplan los colores desconocidos del azul del mar y los rojos del cielo, tanto en su amanecer como en su atardecer, que hacen a los sentidos dar experiencias únicas, y que llevan a exaltar a Dios.
Hasta que ese mar se embravece, para que su poder se sienta sobre la embarcación, haciéndola crujir con tal sensación de fragilidad que nos hace creer que será imposible completar el viaje. Sin poder mantenerse en pie y agotados por la sensación de vacío que produce el oleaje, surge el clamor “¡Dios mío, ayúdame!”.
Llega la calma nuevamente, y la gratitud a Dios sube como oración de alabanza y de dependencia y consagración de nuestras vidas al Supremo.
Si esta poesía del mar la comparáramos con nuestras vidas, ¿no nos parecen similares los estados?
Comenzamos apreciando la vida que Dios nos ha dado, pero la llevamos para nuestros propósitos personales: “para comerciar surcaron las muchas aguas”. ¿Dónde quedó Dios y nuestra admiración por él?
Al llegar las penurias de los sinsabores, en donde más y más se agitan las aguas, nos acordamos del cartelito que tenía el presidente Kennedy en su escritorio: “Oh Dios, tu mar es tan grande y mi barca tan pequeña”.
Pero Dios puede estar en la fuerza de la furia externa a la nave, como en el interior de mi corazón y darme paz.
Cuando me doy cuenta de ello, contemplo Su persona y le exalto por Su compañía.
¿Puedes vivir todas estas experiencias para con Dios, por haber tenido a Jesucristo como tu Salvador personal? Jesús es el único mediador entre Dios y los hombres (1 Timoteo 2:5), y nadie va al Padre si no es por Él (Juan 14:6).
GUSTAVO ARDUSSO, Licenciado en Sistemas Navales, ha estado en la Armada Argentina por 38 años, retirándose como Capitán de Navío de Infantería de Marina, habiendo cubierto distintos cargos como Comandante de Unidades, Misiones de Paz de la ONU, y otras funciones significativas en el país y el extranjero. Actualmente, es uno de los pastores de la Iglesia de Bahía Blanca, con Maestría en Teología y Seminarios de Apologética Bíblica y Liderazgo HAGGAI. Lleva adelante, con su esposa Adriana, la presentación interactiva “Titanic Más Allá del Naufragio“.
2 Comments
Saludos hermano de llamada de media noche.me gustaria saver si tienen mensaje cortos en audio.Dios siga bendiciendo sus programa.reciban muchos Saludos desde suiza.
Hola querido hermano, aquí le dejo 2 links: https://llamadaweb.org.ar/dones-espirituales/ https://llamadaweb.org.ar/tiempos-finales/
Allí puede encontrar algunos audios. Estamos trabajando para proveer un canal de podcast.
Dios le bendiga