“Ciertamente vengo en breve”.
Apocalipsis 22:20
Hoy todos reconocemos que los acontecimientos en nuestra era apuntan hacia el fin de la dispensación de la gracia. El Señor Jesucristo volverá, y podemos decir que sucederá en breve porque las señales que Jesús nos profetizó ya se han cumplido. ¿Qué significado tiene esta noticia para nosotros? ¿Cree usted que esto no influye en su vida? De ser así está equivocado, pues al igual que la primera venida del Señor Jesús nos trajo la salvación, así también su segunda venida traerá el juicio (juicio de Dios sobre la tierra) porque las personas no le obedecieron a Él ni a sus mandamientos. En el último libro de la Biblia, estos juicios se describen como los juicios de los sellos, de las trompetas y de las copas. Son terribles catástrofes que destruirán casi todo el mundo. Muchas personas morirán e irán a la perdición eterna. Pero antes de eso volverá el Señor Jesús para llevar a sus hijos al cielo, junto con Él. Si usted conoce al Señor Jesucristo como su Señor y Salvador personal (Romanos 8:16), puede estar seguro de que también estará presente en el arrebatamiento. En 1 Tesalonicenses 4:17 leemos: “los que vivimos (…) seremos arrebatados juntamente con ellos (aquellas personas que ya han muerto en el Señor) en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor”. Si usted aún no tiene esta seguridad de ser un hijo de Dios, entréguele su vida al Señor Jesús y pídale que Él le perdone sus pecados. “El que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado” (Juan 3:18). Así usted tendrá la promesa del Señor: “Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios” (Juan 1:12).
Por Erich Schäfer